Dos estudiantes de la Universidad de Harvard, AnhPhu Nguyen y Caine Ardayfio, han desarrollado un proyecto que pone en evidencia los riesgos que el uso de gafas inteligentes con tecnología de reconocimiento facial puede suponer para la privacidad y la seguridad en espacios públicos.
Estas gafas, que comúnmente incluyen cámaras y funciones como reproducir música, recibir llamadas o interactuar con asistentes virtuales, han sido modificadas por los estudiantes para que reconozcan automáticamente a las personas enfocadas y extraigan información disponible en Internet sobre ellas en tiempo real.
El proyecto busca generar conciencia sobre las implicaciones del uso de esta tecnología, que podría revelar la identidad de las personas sin su consentimiento, destacando los peligros asociados a la invasión de la privacidad en la vía pública.
Este proyecto, como han compartido en redes sociales, muestra lo fácil que puede ser acceder a datos sensibles de cualquier persona que esté en la vía pública. A partir de la captura del rostro se obtiene el nombre, la dirección de su hogar, sus publicaciones en redes sociales o los miembros de su familia, una información que se recibe prácticamente al instante en el móvil.
Ellos lo han probado con compañeros de universidad y con ciudadanos ajenos a esta institución, llegando a conversar con ellos fingiendo que los conocen a partir de la información que han obtenido de ellos.