Se ha aprobado en el Congreso de Estados Unidos un Proyecto de ley que autorizará a los proveedores de Internet a vender los datos de sus usuarios sin su consentimiento. De esta forma quedará anulado el reglamento redactado por el anterior gobierno para la FCC (Comisión Federal de Comunicaciones), que garantizaba la privacidad de los internautas.

Google y Facebook se regían por otra normativa. El hecho de que estas dos compañías no aplicaran el reglamento establecido por los demócratas, en cuanto a las garantías de privacidad, ha sido motivo de disputas, ya que el resto de empresas no podían hacer uso de esta información. Con esta nueva norma, todos los proveedores competirán en igualdad de condiciones dentro del negocio de la publicidad online.

Frente a la opinión de los republicanos, que veían el reglamento del gobierno demócrata como un exceso regulatorio, el director ejecutivo del Centro para la Democracia Digital, Jeffrey Chester, defendió la privacidad online de los usuarios estadounidenses, explicando que “no estarán nunca a salvo de tener sus datos personales sigilosamente examinados y vendidos al mejor postor”.