Si bien es cierto que, algunas semanas atrás, Vodafone TV lanzó un paquete de fútbol para bares, la compañía británica decidió adoptar, hace ya varios meses, una estrategia comercial que pasa por abandonar el deporte más popular en España, centrándose en la telefonía y el Internet low cost.

Aquellas decisiones, que en su momento causaron una enorme controversia tanto dentro como fuera de la operadora, recién ahora están comenzando a dar sus primeros frutos positivos, si atendemos a los resultados financieros que sus responsables confirman para el segundo trimestre del año fiscal.

Este período, que va del 1 de julio al 30 de septiembre del presente 2020, le ha permitido a la europea cosechar ni más ni menos que 488 millones de euros de beneficio bruto, un 6% más de lo obtenido en el mismo período de 2019, encaminándose por fin a la tendencia positiva tan esperada.

Desde Vodafone han asociado esta mejora en sus números a «los menores costes de contenidos, así como a los avances en el proceso de digitalización, con un modelo organizativo y una cultura más ágil; y a eficiencias en los costes, compensando el deterioro de ingresos asociado a la caída del turismo, a costes directos más altos por contenidos de televisión y al incremento de impagados».

Otra de las claves de esta progresiva mejora se debe, al parecer, al muy buen rendimiento que está exhibiendo Lowi, la low cost principal de la multinacional, de enorme crecimiento en el país.

En cualquier caso, todo indica que luego de varios períodos en los que aquella estrategia comercial de Vodafone pareció un gran error, la británica por fin retoma la senda del éxito.