La novela en torno al estreno de Mulán a través de la plataforma digital Disney+, en lugar de realizarse por intermedio de las salas de cine a causa del Covid-19, sigue sumando capítulos. Si primero fueron las discusiones en torno al elevado precio por ver la cinta, ahora podemos analizar qué tal ha ido la jugada.

Y lo cierto es que, en primera instancia, salta a la vista una conclusión imposible de refutar: la expectativa en torno al film creció a medida que se acercaba el día de su lanzamiento oficial, llevando a que la gente se desespere por verla, ya sea descargando Disney+ en sus equipos… o pirateando el contenido.

Como explicamos en su momento, quienes quisieran ver la nueva adaptación del cuento chino de Mulán han tenido que desembolsar un monto por encima de los 20 euros para hacerlo, aunque la firma norteamericana explicó que esto significará tener acceso también a otros títulos en el futuro.

Lo interesante para Disney es que, según los datos de la empresa Sensor Tower, que se dedica a realizar investigaciones acerca del nivel de descargas de apps, el número de descargas de la app de Disney+ aumentó cerca de un 70% el pasado fin de semana entre iOS y Android gracias a Mulán.

Uno podría suponer entonces que la estadounidense acertó con esta estrategia comercial, aunque hay quienes aseguran que, de haber sido más accesible el valor para suscribirse a este contenido -más allá del precio original del servicio- hubieran recaudado una suma incluso mayor.

¿En qué se basan? En las informaciones que indican que Mulán se transformó casi inmediatamente en una de las películas más pirateadas de todos los tiempos, colocándose en las tres primeras posiciones de descargas en sitios de dudosa reputación como The Pirate Bay, a los que Disney pretendía evitar.

Veremos, con estas conclusiones, cuáles son las medidas que Disney+ toma en el futuro.