Considerando que sólo 1 de cada 5 familias piensa que Internet es negativo para sus hijos, y que la mitad de los niños de entre 2 y 8 años poseen un dispositivo móvil, conviene ser sumamente cuidadoso con el acceso a contenidos pornográficos por parte de los más pequeños.
Decimos esto porque un reciente informe realizado por la Universidad de las Islas Baleares en colaboración con varias ONG de infancia, ha determinado que a nivel nacional, el primer acceso de los niños a la pornografía se produce desde los 8 años, siendo habitual desde los 14.
Por supuesto, son los smartphones grandes protagonistas de esta situación actual, que de alguna forma ha venido a reemplazar los tiempos de nuestra niñez o la de nuestros padres, cuando accedíamos a contenidos pornográficos a través de revistas temáticas.
Este estudio, denominado Nueva pornografía y cambios en las relaciones interpersonales, y que ha analizado los casos de 2.457 jóvenes de entre 16 y 29 años, intenta concienciar a los usuarios que tengan hijos pequeños, acerca de los riesgos que existen en cuanto a esta exposición cuando no se ha alcanzado la madurez adecuada por parte de los niños.
Esto, en relación con la configuración habitual que la industria pornográfica, cuyos contenidos suelen mostrar una absoluta dominación del hombre sobre la mujer, en la que no existe una negativa, ni tampoco un contexto en el que se desarrolle la acción.
Los expertos consideran, por este motivo, que es sumamente importante que tanto las instituciones como los adultos o tutores presten atención a los contenidos que ven sus hijos en Internet, como que charlen al respecto de ellos.